13 octubre 2008

El trabajo duro tiene su recompensa


En un mundo en el que cada vez se valora menos el esfuerzo y el sacrificio de la superación, tenemos personajes públicos que transmiten ese mensaje a la humanidad.
De todos es sabido lo que acompaña al deporte de alto nivel: dinero, popularidad y un largo etcétera que adormecería a la mayoría de nosotros en un feliz sopor. Pero hay una raza de deportistas como Alonso o Nadal que trasmiten a la juventud (la mas necesitada ahora mismo de estos mensajes) que el esfuerzo y la tenacidad por un objetivo tienen sus frutos.

Fernando Alonso, en los últimos meses, ha dejado los flashes y los banquetes a un lado para ponerse el mono de trabajo y untarse de grasa junto a los mecánicos e ingenieros para mejorar su coche.
El esfuerzo al final ve sus frutos. Después de un año gris vuelven sus sonrisas y "poses" de ganador.